La salida de los editores del New Republic y de un grupo amplísimo de colaboradores ha provocado un interesante debate sobre el sentido de la publicación y los retos de las revistas políticas y culturales en en entorno de las nuevas comunicaciones. El New York Times publica un artículo que expone el sentido de la controversia. Mientras David Greenberg celebra que la revista acogió la «heterodoxia liberal», Jacob Heilbunn, cuestiona el mito de su «liberalismo»: la revista, dice, hacía tiempo que había perdido rumbo. Jesse Walker sugiere que lo que pasa ahora no es ruptura con la historia sino, más bien, repetición de su historia.
Chris Hughes, el nuevo dueño de la revista, expone sus razones para trazar una nueva dirección: no se trata del pleito entre los viejos y los nuevos medios sino de la necesidad de adaptar la tradición a la tecnología.
NEWSROOM (la serie) all over again.
Muy interesante.